Para nutrir y cuidar nuestra piel, nada mejor que acudir directamente a la naturaleza. Uno de los ingredientes naturales más beneficiosos que vas a encontrar es el aceite de macadamia.
¿Todavía no lo tienes en el radar? Pues acompáñame a descubrir todas propiedades y beneficios para tu dermis.
Esta maravillosa nuez originaria de Australia es rica en vitaminas y nutrientes que te van a dejar hidratada, flexible y protegida de pies a cabeza.
Suaviza, fortalece y da brillo a tu pelo, pero también es fantástico para tu piel, especialmente para la más seca y deshidratada.
La clave de su éxito es su composición perfecta y equilibrada de ácidos grasos esenciales, que consiguen reparar las pieles más secas y maduras, a la vez que equilibran la producción de sebo de los cutis grasos.
Su alto contenido en ácido linoleico restaura la función de barrera de la piel, impidiendo la pérdida de agua, la infiltración de organismos perjudiciales y los daños ambientales en la dermis.
Y como puedes adivinar, esto hace que la dermis se mantenga hidratada y saludable, pareciendo más joven y suave.
Y sus propiedades antioxidantes tampoco se quedan atrás. La vitamina E y el escualeno nos ayudarán a prevenir las arrugas y otros signos de la edad al reforzar la protección dérmica contra las toxinas ambientales y los rayos de sol.
Este aceite antienvejecimiento se absorbe de maravilla, no es graso y lo pueden utilizar todo tipo de dermis, con o sin problemas.
Todas estas propiedades no solo lo hacen esencial para un régimen de cuidado corporal saludable, sino también para el cabello y el rostro.
Echemos un vistazo más de cerca a los beneficios del aceite de macadamia y por qué este elixir es útil en el cuidado de la piel.
Beneficios del aceite de macadamia para el rostro y el cuerpo
Aquí hay cinco razones por las que deberías empezar a usar esta sustancia tan pronto como sea posible:
Es un buen hidratante
Gracias a su perfecto equilibrio de ácidos grasos, retiene la humedad de la piel a la perfección para que se mantenga suave y flexible por más tiempo.
Estos fabulosos ácidos grasos nutren el cutis y ayudan a combatir la descamación y la piel cuarteada para prevenir arrugas y líneas finas y que el maquillaje siente de lujo.
No obstruye los poros
Esta cualidad es muy importante en un aceite, sobre todo para las pieles más grasas y con tendencia al acné, y podemos decir que el de macadamia no es comedogénico.
¿Qué significa esto? No comedogénico significa que tiene el equilibrio correcto de ácidos grasos esenciales, y no va a obstruir los poros que luego causan puntos negros y espinillas, así que lo puedes utilizar con total tranquilidad.
Es más, imita de cerca el sebo natural de nuestra piel, por lo que ya tiene una afinidad innata con la epidermis y causa menos problemas.
Ayuda a prevenir las arrugas y las manchas
Otro compuesto interesante presente en el aceite de macadamia es el escualeno.
El escualeno es un antioxidante que nuestros cuerpos producen de forma natural, pero potenciarlo con aceite de macadamia puede reducir la carga oxidativa que provocan los radicales libres.
Esta reducción ayuda a prevenir las arrugas y las manchas de la edad, acelera la curación de la dermis y otros signos del envejecimiento.
Junto a la vitamina E, otro gran antioxidante, neutralizan los radicales libres para proteger la piel del envejecimiento y transporta nutrientes y agua por todo el cuerpo.
Además de proteger, las propiedades antibacterianas del escualeno reducen el acné y las irritaciones, y ayudan a igualar el tono de la piel.
Calma el picor y el enrojecimiento
Una de las mejores bazas del aceite de macadamia es que contiene fitoesteroles, sustancias vegetales llenas de propiedades antiinflamatorias que ayudan a calmar el picor y el enrojecimiento de la piel.
Y como el óleo es ligero y penetrante, lleva esas sustancias vegetales ahí donde más se necesitan.
La proporción casi perfecta de Omega 3 -antiinflamatorio- y Omega 6 -regenerador- hace que el aceite de esta nuez sea perfecto para curar muchas afecciones de la piel como el eccema y la psoriasis.
Junto con el Omega 7 ayuda a cicatrizar mejor las heridas, los rasguños y quemaduras; y gracias al omega 9 suaviza y alivia.
Apoya el buen funcionamiento de la barrera cutánea
Todos nacemos con una barrera cutánea natural. Esa barrera mantiene las cosas en su sitio para que la piel esté flexible y joven. Pero por desgracia, el estrés ambiental y otros factores la deterioran con el tiempo.
Como resultado, perdemos humedad y nuestra piel se reseca y descama.
Por ahí aprovechan los alérgenos, las bacterias y otras sustancias indeseables para penetrar más fácilmente en la piel, lo que provoca picor, infección e inflamación y una mayor ruptura de la barrera protectora.
Pero las propiedades antioxidantes y nutritivas del aceite de macadamia protegen, hidratan y ayudan a mantener la barrera de protección natural en buen estado.
Esta barrera en óptimas condiciones también nos protege de los daños del sol, así que no dejes de usarlo tanto en la piel como en el cabello para prevenir la oxidación.
Afortunadamente, el mundo de la belleza conoce todos estos beneficios y los utiliza en muchos de sus productos para el cuidado de la piel.
Cómo usar el aceite de macadamia
Al igual que muchos aceites naturales, la mejor manera de incluirlo en tu rutina diaria es de forma pura prensado en frío, y si es orgánico, mejor.
Otra buena idea es mezclarlo con otros aceites e ingredientes activos para cosechar variados beneficios de unos y otros. Esto es lo que conseguimos utilizando cosméticos que han añadido el aceite de macadamia a su fórmula.
Generalmente lo vas a encontrar en productos para nutrir e hidratar el cuerpo, como esta lista que he preparado de los mejores aceites corporales que he probado; aunque seguramente también lo encuentres en algunas cremas para cutis secos o maduros.
Mucha gente opta por comprar la sustancia pura, y hacer sus propios mejunjes caseros con otros ingredientes naturales, como mascarillas para el pelo, exfoliantes corporales o bálsamos para los labios.
Es perfecto como compuesto reparador, así que si tienes problemas de sequedad, inflamación o picores, úsalo a diario. Si no, te servirá para prevenir problemas y daños mayores en el futuro.
Como has podido comprobar, el aceite de nuez de macadamia es en realidad uno de los tesoros para el cuidado de la piel más poderosos de la naturaleza. ¿Ya has empezado a utilizarlo?